Nombre del autor:Lina María Gallego Ramírez

Los primeros 1,000 días, desde la concepción hasta el segundo cumpleaños del niño, representan una ventana única e irrepetible en el desarrollo infantil. Durante este período, el cerebro y el cuerpo del niño experimentan cambios fundamentales, influenciados por factores como la nutrición, la estimulación y el apego. Proporcionar un entorno nutritivo, seguro y estimulante es vital para garantizar su futuro bienestar y éxito. Como cuidadores y sociedad, nuestra inversión en estos días cruciales moldea el futuro de cada niño y, en última instancia, el de nuestra comunidad.